José Dominguez “El Cabrero” es un cantaor atípico que echó los dientes en el campo y no en los tablaos y ha acompañado a más cabras que a bailaores/as. Y aun así es un mito y leyenda del cante Flamenco y como le pasaba a Camarón se sale de los terrenos flamencos en cuanto a aficionados se refiere. Estando estos dos artistas en las antípodas pueden gustar a rockeros o punkis, a ortodoxos del cante incluso a progres trasnochados con un pasado de “izquierdas”. Los únicos que no aguantan el cante de José son los grandes H.P. de este pais.
Su voz es su arma, sus palabras sus balas. Sus fandangos son bombas letales que nos hacen levantar de los asientos y a nadie le deja indiferente. Si José tuviera aire de marisma ya sería un acorazado aunque sabemos que es buen aficionado y le gusta saborear los cantes de los puertos donde también hay jornaleros del mar.
La última vez que le vimos fue en Viznar y sigue teniendo un torrente de voz que ya quisieran muchos. En Rivas, cerca de la República Independiente de Vallekas posiblemente se dé un baño de masas y además junto a su hijo, Emiliano Dominguez "Zapata" . Tenemos Cabrero para rato y para decir a las ratas que se escondan. Los gatos/as estamos al acecho para cazarles en cuanto se descuiden.
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lunes, 20 de abril de 2015
El Cabrero, una voz que resiste.
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